Las tendencias que dominan el video marketing en 2021
Modas pasajeras, tendencias y cambios
Ya no se trata de ‘qué pasará’, sino de ‘qué nos deparará’.
Saber distinguir entre un contenido que crea tendencia, y una tendencia pasajera es clave para cualquier estrategia de video marketing. Los hechos vividos estos meses han traido cambios conductuales en el consumidor, y no todos tienen la misma naturaleza. Todo lo vivido nos afecta como sociedad y también como individuos y, como en la vida, unas cosas marcan más que otras. La estrategia de video marketing no ha de ser ajena a dichos cambios, pero es muy distinto desarrollar un contenido para un consumidor cambiante que para uno que ha evolucionado en su manera de ser, pensar o consumir.
Los cambios dan miedo a todas aquellas empresas a las que ya les va bien. Los cambios suponen inversión, riesgo, planificación, pensamiento estratégico y una facultad innata para adelantarse a los acontecimientos. Implican, al fin y al cabo, un desarrollo de nuestra neuroplasticidad, y no basta con retomar aquellas estrategias prepandémicas que ya quedaron tan atrás.
Los consumidores están recuperando la ‘normalidad’, sí. Pero el mundo ya ha realizado un salto que, en cierto sentido, desde Voel pensamos no tiene vuelta atrás.
Definirse da vértigo
Digitalmente hablando, ese salto digital ha supuesto un adelanto de hasta diez años de lo que se esperaba en el sector. Y no ha sido un salto que vaya a afectar solo a los grandes. Pequeños autónomos, pymes e incluso la propia Internet han experimentado los primeros cambios, y a buen seguro que no serán los últimos. Los consumidores demandan cada vez más privacidad en la red y para con las empresas a las que les ceden sus datos, y las marcas afrontan el reto de una experiencia de usuario cada vez más personalizada y dinámica, donde la publicidad no sea percibida como tal.
Hablando de una publicidad latente y estrategias de videomarketing, es inevitable llegar a nuestro siguiente concepto: la ya archiconocida vertiene del marketing patente, sin máscaras ni artificios. Un marketing más humano, hecho para personas y contado por personas, no por marcas carentes de sentimientos.
Pregúntate una cosa si quieres empezar a desarrollar una estrategia de video marketing acorde a este nuevo presente: ¿cómo te imaginas tu marca o empresa? ¿Es un científico loco? ¿Una alpinista en busca de su próximo K8? ¿Un Indiana Jones? Definir a tu marca con rasgos humanos te facilitará comunicarte con un cliente con tus ‘mismas aficiones’.
Banderas permanentes
Tras definirse a uno mismo, viene lo más divertido, pero también lo más comprometido: sé tú mismo, tal y como te has definido, y sé fiel a ti mismo.
Tu cliente objetivo no es tonto, y será el primero en quitarte la máscara al menor atisbo de falsedad en tus palabras o acciones. Una estrategia de video marketing fundamentada en una imagen impropia de tus valores -sean estos nuevo o no-, irá al traste con toda tu identidad corporativa.
No basta con celebrar la internacionalidad de un día concreto, si el resto del año no haces mención a ello, del mismo modo que ponerte la camiseta de un equipo solo cuando gana no te convierte en parte del equipo.
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